| La linda poblana - 42pusieren á la Doncella
en un claustro; y á a su hijo
le precio que Siquiera
los Estudios para verle
sacerdote; con tan terca
constancia, tanto capricho,
severidad tan resuelta,
que originó, sin pensár,
su tragedia, y mi tragedia:
Pues llamandome mi Amigo
una mañana funesta,
con despecho decisibo
me dice de esta manera:
Querido Amador: tu solo
mereces que te refiera
mis proyectos: Yo me voi
ã donde jamas se sepa
de mi. Perdido mi amor ...
Forzado ã que por la Yglesia
tome estado ... Un Padre impio,
inflexible ... Yá me estrechan
ã dejar la Patria. ... A Dios,
mañana parto. Si aprecias
mi amistad, guarda secreto,
y apartame no resuelbas
de este pensamiento, ã donde
vida, y quietud se interesan.
Ni mis ruegos, persuaciones,
y amór, hicieron torciera
su designio. Ultimamente | La linda poblana - 42pusieren á la Doncella
en un claustro; y á a su hijo
le precio que Siquiera
los Estudios para verle
sacerdote; con tan terca
constancia, tanto capricho,
severidad tan resuelta,
que originó, sin pensár,
su tragedia, y mi tragedia:
Pues llamandome mi Amigo
una mañana funesta,
con despecho decisibo
me dice de esta manera: |