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los objetos informativos y 2) que la preservación digital ha renunciado a la conservación de los medios físicos subyacentes es que la preservación digital tiene una relación significativamente diferente con el apoyo a las ciencias de la preservación. Un conservador que trabaja con una pintura quiere comprender la química de todo. Para el conservador, la base del trabajo está en las ciencias del mundo natural y físico (química, ciencia de los materiales, física y biología). En contraste, las ciencias subyacentes para la preservación digital son las ciencias de lo artificial; aquellas como las ciencias de la computación, la informática, el aprendizaje automático y la inteligencia artificial. Estamos comenzando a comprender las implicaciones de esto, pero significa que nuestras relaciones con las ciencias subyacentes deben cambiar a medida que avanzamos cada vez más para trabajar con la preservación digital.

Conservación de los medios digitales: inviable

Se ha derramado mucha tinta sobre por qué la preservación digital es tan difícil. Gran parte del impulso en este trabajo proviene del anhelo por las posibilidades de los medios del pasado. Gracias a su larga vida y a las buenas condiciones alrededor de los materiales, hoy tenemos acceso directo a pinturas rupestres de hace 40,000 años, pergaminos, esculturas y edificios de hace 2,000 años. Incluso en la historia más reciente, uno de los éxitos de la microfilmación respecto a la preservación fue la idea de que, en buenas condiciones, la copia de registros en microfilm podría durar casi mil años.

Las estimaciones sobre el promedio de vida de diferentes tipos de medios digitales varían dramáticamente. Pero una cosa está clara, no se parecen en nada a lo que tenemos con nuestros medios analógicos. La cinta magnética, los disquetes, los discos duros, el almacenamiento flash, los CDs y los DVDs varían en cierta medida, pero el punto central es que generalmente los medios están bien durante una década o dos antes de que requieran de algunas técnicas bastante extremas para extraerles datos. Es verdad que ha habido una variedad de intentos para crear medios más longevos; el M-Disc es un CD de piedra que supuestamente estará bien por mil años; hay un esfuerzo por crear un almacenamiento de cinta basado en aluminio que mantenga los datos seguros incluso en un incendio. Sin embargo, estas tecnologías aún no han despegado realmente en el mercado. Los expertos son muy escépticos de que incluso puedan despegar; el ciclo de actualización de las tecnologías es tan rápido que la mayoría de los medios digitales nunca se acercan al final de su vida útil antes de que sean descartados.

Las interfaces, tanto las conexiones de hardware (piense en lo que se necesitaría para encontrar un lector para un disquete de 8 pulgadas o para un disco Zip), como los programas de software y los controladores que pueden abrir y leer datos van y vienen mucho antes de que los medios hayan llegado al final de su vida. Vale la pena subrayar que esta no es una característica propia de la informática. Tiene menos que ver con la naturaleza de los medios digitales que con la obsolescencia programada y la gigantesca industria informática que vierte recursos considerables para mantener el ritmo de las expectativas de los dispositivos informáticos cada vez mejores, más rápidos y con más almacenamiento cada vez más pequeños. También vale la pena señalar que, si bien hemos visto un crecimiento explosivo en la cantidad de información digital que podemos almacenar en un espacio físico determinado durante el último medio siglo, no existe una razón inherente para que pueda continuar al mismo ritmo. Cada avance sucesivo en la tecnología del almacenamiento digital ha implicado nuevas técnicas sobre cómo aumentar la capacidad de los medios de almacenamiento y mantener los tiempos de lectura altos, pero existen límites físicos muy reales para algunos medios a los que se está por llegar. En cualquier caso, los resultados para la preservación de los medios digitales siguen siendo los mismos. Incluso si tienen medios antiguos, se necesita mucho trabajo para poder acceder a la información. Ese trabajo se vuelve ez cada vmás difícil a medida que pasan los años y los medios subyacentes se siguen degradando.

Históricamente, los conservadores desarrollaron y crearon técnicas para reparar, manipular o hacer que los medios vuelvan a ser útiles. De esta forma, si se tiene un trabajo en papel que no es libre de ácido,

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los objetos de información y 2) que la preservación digital ha cedido a la conservación de los medios físicos subyacentes es que la preservación digital resulta en una relación significativamente diferente para apoyar las ciencias de la preservación. Un conservador que trabaja con una pintura quiere comprender la química de todo. Para el conservador, la base del trabajo está en las ciencias del mundo natural y físico (química, ciencia de los materiales, física y biología). En contraste, las ciencias subyacentes para la preservación digital son las ciencias de lo artificial; aquellas como las ciencias de la computación, la informática, el aprendizaje automático y la inteligencia artificial. Estamos comenzando a comprender las implicaciones de esto, pero significa que nuestras relaciones con las ciencias subyacentes deben cambiar a medida que avanzamos cada vez más para trabajar con la preservación digital.

Conservación de los medios digitales: incompleto

Se ha derramado mucha tinta sobre por qué la preservación digital es tan difícil. Gran parte del impulso de este trabajo se basa en un anhelo por las posibilidades de los medios del pasado. Debido a su fórmula de larga vida y a las buenas condiciones respecto a los materiales, tenemos acceso directo a pinturas rupestres de 40,000 años, pergaminos, esculturas y edificios de 2,000 años. Incluso en la historia más reciente, uno de los éxitos de la microfilmación respecto a la preservación fue la idea de que, en buenas condiciones, copiar registros en microfilm podrían durar casi mil años.

Las estimaciones sobre el promedio de vida de diferentes tipos de medios digitales varían dramáticamente. Pero una cosa está clara; no se parecen en nada a lo que tenemos con nuestros medios analógicos. La cinta magnética, los disquetes, los discos duros, el almacenamiento flash, los CD y los DVD varían en cierta medida, pero el punto clave es que los medios son generalmente buenos durante una década o dos antes de que requiera algunas técnicas bastante extremas para extraer datos de ellos. Para estar seguros, hay una variedad de intentos para crear medios más longevos; el M-Disc es un CD de piedra que supuestamente será bueno por mil años; hay un esfuerzo por crear un almacenamiento de cinta basado en aluminio que mantenga los datos seguros incluso en un incendio.

Sin embargo, estas tecnologías aún tienen que despegar realmente en el mercado. Los expertos son muy escépticos de que puedan despegar; el ciclo de actualización de las tecnologías es tan rápido que la mayoría de los medios digitales nunca se acercan al final de su vida útil antes de que se descarten.

Las interfaces, tanto las conexiones del equipo de cómputo (piense en lo que se necesitaría para encontrar un lector para un disquete de 8 pulgadas, o un disco Zip), así como los programas de computadora, los controladores que pueden abrir y leer datos, frecuentemente van y vienen, mucho antes de que los medios hayan llegado al final de su vida. Vale la pena subrayar que esta no es una característica propia de la informática. Tiene menos relación la naturaleza de los medios digitales que la obsolescencia planificada y gigantesca industria informática que vierte recursos considerables para mantener el ritmo de las expectativas de dispositivos informáticos mejores, más rápidos, con más y más almacenamiento en tamaños más pequeños. También vale la pena señalar que, si bien hemos visto un crecimiento explosivo en la cantidad de información digital que podemos almacenar en un espacio físico determinado durante el último medio siglo, no hay una razón inherente que deba continuar al mismo ritmo. Cada avance sucesivo en la tecnología de almacenamiento digital ha implicado nuevas técnicas sobre cómo aumentar la capacidad de los medios de almacenamiento y mantener los tiempos de lectura altos, pues existen límites físicos muy reales para algunos medios que se están afrontando rápidamente. En cualquier caso, los resultados para conservar los medios digitales siguen siendo los mismos. Incluso si tiene medios antiguos, se necesita mucho trabajo para poder acceder a la información. Ese trabajo se vuelve más difícil a medida que pasan los años y que los medios subyacentes se siguen degradando.

Históricamente, los conservadores desarrollaron y crearon técnicas para reparar, manipular o hacer que los medios vuelvan a ser útiles. Entonces, si termina con un trabajo que no está en papel libre de ácido,